Lacamon 7 - FS Sport 3




Después de la victoria de la semana pasada, Lacamón debía confirmar con este partido su recuperación; si bien es cierto que el último encuentro no supuso dificultad alguna, no atenta contra la verdad decir que se convirtió en una demostración de fuerza y pundonor por parte de los rojillos, pues tuvieron que soportar un ataque químico a gran escala (principalmente por parte del número 69 de River Dik, ¡a ver si lavamos la camiseta pedazo de guarro!).

El rival de esta jornada era F. S. Sport, cuyo último partido terminó en tangana, hecho que propició que la mayoría de jugadores de Lacamón vinieran con sus calzoncillos de camuflaje, es decir, amarillos por delante y marrones por detrás. Haciendo de tripas corazón y teniendo presente la posibilidad de participar en una auténtica pelea callejera a lo West Side Story, se presentaron a la convocatoria Xavi el Gori, Josifón, Miguel ConeHead, Ferdituby, Juaco Spok (que llegó cojeando como si...y acompañado de una nueva fanática de Lacamón, Fátima) y Kiko, éste último en sustitución del Indio, convaleciente de la lesión que sufrió en el partido anterior. Al Gasofihya no apareció, pues se encuentra buscando la piscina de Cocoon para solucionar sus achaques seniles; y Carlitos tenía cita con su esteticién para que la depilara el bajo vientre, pues la semana que viene se presenta al concurso de Miss Tanga Valdepeñas 2005.

El partido comenzó con una estrategia sencilla por parte de los rojillos: “Cuando tengáis el balón no os paréis a pensar, puede doler, y pasádsela rápidamente a Kiko”. Dicho y hecho, tan pronto Kiko tuvo en sus pies el primer balón lo introdujo en la portería contraria, lo que desató el asombro del resto de los jugadores de su equipo, quienes creían por propia experiencia que tal cosa era imposible. Poco a poco Lacamón se fue sintiendo cómodo en el partido y no tardó en llegar el segundo gol obra Bustin tras merendarse a toda la defensa rival, bueno, quien dice toda dice un único individuo. Tras esto, F. S. Sport consiguió su primer gol, en una jugada en la que José Ron estuvo jugando al “tuya - mía” con un par de jugadores rivales, por favor perdonadle, es que nació así. El acercamiento en el marcador por parte de F. S. Sport duró poco, pues inmediatamente después Kiko estableció el 3-1 con el que se llegó al descanso. Nada más reanudarse el encuentro Kiko volvió a dar muestras de su calidad (y de su incapacidad para los juegos en equipo) marcando el cuarto gol de Lacamón.A pesar del holgado resultado, Lacamón siempre tuvo claro lo que tenía que hacer y en ningún momento cejó en su intento de meter un nuevo gol. Así, Miguelito “el Piruleta” perpetró (nunca mejor dicho) un tiro desde el campo de los rojillos con dirección a la portería contraria que acabó saliendo fuera del campo por... ¡¡¿¿la línea de banda??!!, por si esto fuera poco, al tiempo que chutaba emitió el característico grito del Tití León cuando se roza el escroto con una ortiga. Hay que tener muy presente que Miguel juega tras una prolongada lesión que ha mermado enormemente sus capacidades futbolísticas, conocidas de sobra por todos.

A continuación llegaron varios goles encadenados por parte de ambos equipos. Al segundo de F. S. Sport contestó Kiko con su cuarto gol; y al tercero, Fernandisco con uno de sus inigualables trallazos que dejó mutilados a varios contrarios. Josifón cerró el marcador estableciendo el definitivo 7-3, tras una jugada personal en la que demostró lo útil que puede llegar a ser el copiar los movimientos pélvicos de Tony Manero. Como hechos a reseñar destacan las felicitaciones de F. S. Sport a Juaco por su actuación (con invitación incluida a una fiesta de los “osos” de Chueca) y la caída de José Ron, habitual cuando el suelo está mojado.

Una vez finalizado el encuentro, vuestro equipo favorito se dirigió a su nueva sede de intendencia, para reponer a base de cervezotas y patatotas todas las sales perdidas durante el partido. A la pitanza se apuntó Antoñecu disfrazado de Bob Esponja, condición que le hace invencible en el consumo de bebidas espiritosas.

Una vez terminada la concentración, tuvo lugar un desagradable incidente. Un mocoso de medio pelo increpó a los jugadores de Lacamón, llamándoles julandrones devoradores de calandracas, a lo que el Indio respondió, sujetando amistosamente al imberbe por la mano: “Ven chiquitín que te voy a enseñar por donde amargan los pepinos.” Este momento es el que recoge la foto que acompaña a esta crónica.

Cronista:Josifon